Pensando XLIII

Los pétalos de una rosa amarillenta se desprenden junto al viento frío que entra por esa puerta que dejaste semi abierta al tener prisa de irte sin mirar atrás.

Ahora en que ojos observare mi reflejo…mi futuro. En que profundidad perderé mis pensamientos…mi ser quedo flotando entre la niebla espesa y te sueño con desesperación.

Que oración creara el hombre hambriento de un ídolo donde pueda descansar su fe y conforte esta alma que pérdida esta sin ti?

El sol caerá para darle paso a la noche y así caerá una sola lágrima por ti…

Visiones de un tiempo sin errores se precipitan todas como película muda, sin color y amargamente graciosa… y ahora como una sepia están todos mis recuerdos que divulgaban los secretos de mi juventud pérdida por tus encantos carnales, engañosos y llenos de virtudes que solían ser mi purificación.

En sepia quedó tu sonrisa y tus ojos en un oscuro resplandor.

Pensando XLIII

¿Te decepcione o falle?

¿Debería sentirme culpable o ser juzgado?...pues vi el final antes de que empezáramos.

Si, te vi cegada y supe que yo había ganado.

Así  pues, tomé lo que por derecho era mío…me lleve tu alma a la noche…puede que todo acabara, pero no pararía allí, estoy aquí para ti si es que tienes interés en mi.

Tocaste mi corazón, tocaste mi alma, cambiaste todas mis metas. El amor es ciego y eso lo supe cuando mi corazón se cegó por ti.

En sueños te he besado y sostenido tu cabeza, compartido tus sueños y compartido tu cama…te conozco bien, conozco tu olor, he sido adicto a ti.

Adiós amor, adiós amiga…has sido la única…la única para mi. Adiós amor, adiós amiga has sido la única a la que pude amar.

Soy un soñador pero cuando despierto…puedes quebrar mi espíritu y llevarte mis sueños. Y cuando pase el tiempo recuérdame…recuerda todo lo que llegamos a ser.

Te he visto llorar, te he visto sonreír, te he mirado mientras duermes, podría ser el padre de tus hijos, estaría toda la vida contigo…

Conozco tus miedos y tu los míos..Tuvimos dudas pero estamos bien? Te amo, juro que es verdad…no puedo vivir sin ti.

Adiós amor, adiós amiga…has sido la única…la única para mi. Adiós amor, adiós amiga has sido la única a la que pude amar.

Y aun sostengo tus manos entre las mías y no se cuando voy a dormir. Y con el tiempo sostendré mi alma cuando me arrodille a tus pies…

Adiós amor, adiós amiga…has sido la única…la única para mi. Adiós amor, adiós amiga has sido la única a la que pude amar….y ahora estoy tan solo, destrozado, hundido en la nada porque serás la única para mi. JB

Pensando XLII

Me doy cuenta del dolor gritando y lo escucho dentro de mi mente, pero seguiré andando con esta cicatriz.

Esta bien olvidar, no sentir nada, cubrir mi corazón rasgado. No te preocupes por lastimarme, ya no hay más dolor a pesar de que sea arrastrado por tu olvido.

Ahora mi yo pérdido se derrumba haciendo un sonido…al darme cuenta, solo escucho el sonido del viento…

La leyenda llegó persiguiendo la cicatriz antes de que le mundo sea destruido. Me pregunto si aún recordaras ese cielo de lágrimas, aquel dolor que te protegió…

Pensando XLI

El humo asfixiante y enrarecido por el día arde ante el calor del sol haciendo sombras en mis pensamientos y los droga creando ilusiones, sueños irreales que nunca debió haber soñado.

Las nubes húmedas no existen, ya no siento la brisa de lluvia al caer, ya no existe el rocío que moja las esperanzas marchitas que soñaron con florecer.

Mi alma seca y dolida aún sigue levantada en medio de un bosque devastado por los recuerdos y calcinado por las experiencias que abaten las últimas ruinas de un espíritu que alguna vez sintió la felicidad.

Pensando XL

La noche silenciosa y fría abre mis pensamientos a recorrer la existencia de un día que ya muere y se marchita   plasmando                                                                                            rastros de deseos y sueños que vuelan junto a la brisa de invierno. La noche alimenta el silencio de la soledad que madrugara junto con los destellos de una estrella que brinda nuevas oportunidades, de no estar solos y de u silencio esperando lo inesperado.

La noche acobija mi alma ansiosa del calor que nunca llegara a serlo y un frío envuelve mí mente que ya comienza a apagarse como luciérnaga que vuela su última noche.

                                                                                                             

Pensando XXXIX

Extraña sensación la que me produces, 

permanezco tranquilo, bohemia en el inmenso espacio…

Idealice una estrella en el brillo de tus ojos y le puse nombre,

 un nombre que me recuerda a ti.

Encontré un acorde que no supe cantar pero lo hice mío,

te encontré a ti en mi creación.

Busco modos que me hagan una ilusión de ti y solo encuentro ternura…ternura infinita.

Ya eres canción de un dilema sin causa,

prefiriendo permanecer perplejo ante el calor de tu mirada.